A través de mis Pupilas

¡La poeta está triste! Cuán amargo es dedicarle versos al viento declamando a la nada, mientras su amor se aleja... ¡Si! Es honda su herida Quiere creer en lo que las palabras dicen y los hechos niegan rotundamente... Cual niña embrigada de dolor Ve la frustración en sus manos y no sabe qué hacer por que se desmorona lentamente  Ella llora, en silencio... Total nada queda, más que ausencias y nadie sostendrá más su mano ¿Para qué la poetiza se enamora? ¿Para qué revela su alma al trovador que impío se roba su corazón...?

Mi padre alejó el monstruo debajo de la cama y tu... los fantasmas de mi cabeza Mi madre me ayudó a perder el temor a la oscuridad y tu el miedo a las sombras Tu que crees más en mi que yo misma que sabes cómo armar y desarmarme en dos segundos Sabes mi historia memorizada aún cuando yo la olvido desnuda de caretas y máscaras me encuentro No hace falta guardar ni una arruga de ti siendo el dueño de mi pasado y mi eterno ahora Bien conoces las espirales de mi vida entorno a mis barcos encallados inútiles e inservibles  La lluvia tuya ha suavizado mis manías convirtiéndome en más dulce y soportable ¿Que más hay para decir?  Reconoces de mi lo invisible a mis propios ojos Eres un sueño bellamente imperfecto,  que redobla en ánimo la vida a sobrevenir Emprendes en mi los imposibles y sacudes mis temores...  Volviste la pasión un fuego cual corriente que se guía a través de mis venas y enciende la mirada Mis falsos argumentos, mis locas teorías las vuelves

Se precipitan los sueños contra el piso  unísono aguacero que calma mi calor se van cerrando en agonías mis ilusiones  sólo me quedan conjeturas. Para mi condena tu amor  s e convirtió en bocanadas ese oxígeno que necesitaba  para latir, toda yo creando mi amor desenfrenado. El aire en giros tormentosos  revuela  las ideas que se confunden entre realidades... el cuarto se vuelve guarida de lágrimas la tierra gira y desaparece debajo de mis pies. Besos blasfemos encuentro en mi mente, se acumulan en mi amor rebelde eres prohibido y esta pasión nos arrasa  soy todo lo que puedo ser porque al reconstruirme te impregnaste,  alevoso, culpable me niego a seguir sin ti,  sabes mi consigna ¿cierto? ¿que más puedo decir amor mío? estás en mi, soy por ti,  sin inocentes palabras en mi beneficio; ¡maldigo y bendigo mi insensatez! proporcional a mi estupidez  permití absurda, que en raíces te convirtieras dentro, restaurando con sonrisas el amor  que en hielo tenía entre las manos

Vos y yo sabemos  qué es lo que verdaderamente pasa cada día muero, mueres  estoy, estamos más cerca de sucumbir,  no nos engañemos sabes bien, ingrato,  aunque finjas que todo está bien que cada día damos más p asos  acercándonos  a la fecha final. ¡No somos inmortales, testarudo! Vos y yo sabemos lo que no se dice los ojos gritan, y nuestro corazón teme ni si quiera sabemos si podremos  darnos ése beso, alevoso, prometido,  quizás otro día sea tarde. Entonces,  ¿para qué pospones a mañana tu felicidad? ¡Ay niño malcriado!  Que en tu pecho se esconde una gran verdad no es posible que te encariñes con la inseguridad recapacita, lee, vive, por ti, por mi; pero sin miedos... Guardas tanto recelo  que escudas tu amor también tienes tanto miedo a perder ignorando, a su paso, lo que habías ganado por último amor mío vos y yo sabemos que ya no hay tiempo de platicar las cuentas regresivas no se detienen ni tampoco éste final,

Quiero ser... La sombra que mitiga el cansancio de tu camino el pez que nada en tu pecho cargando tu esperanza la brisa que renueva fe, alentándote a seguir la almohada que alberga tu llanto y tus sueños tantas cosas quiero ser, amor mío que tu de mi te cansarías y yo de ti me rebozaría por que la virtud del amor es energía condensada en dos Por ti amor mío, sólo mío  pretendo ser, una nueva mujer madurar la tierra que cubre mis pies endosarlo en florales perfumes a tu piel En la locura que me acontece planeo ser madre, amiga, hermana,  tu amante apasionada,  el eco de tu verdad y  bastón en las horas inciertas Por ti soy capaz de olvidarme de mi y transformarme en tu poeta enamorada dedicandote ilusiones en verso la doctora que bese tus heridas poniéndote la vendita el banco que albergue tus sentimientos más oscuros en fin cariño mío y sólo mío vas descubriendo quién soy quién fui y por ti...quién quiero ser

De rodillas, a ojos cerrados y manos juntas rezo para que no te alcance un hastío de mi, ni tus ojos de mirar mi retrato, que tus pensamientos viajen hasta aquí donde mis anhelos te guardan con recelo En mi pecho late un amor por ti,  por que es tu pecho que ostenta el que eres, el que amo, el que serás al que no sé por qué, ni cuándo  se volvió tan preciado regalo  En la realidad que acontece,  te quiero, hasta en medio de la dificultad y la tormenta más que en la calma que sobrevendrá Amor libre de impuestos,  sin fecha de caducidad, desprovisto de máscaras y trucos ni términos... ni condiciones

El aire se fuga en forma de suspiros  cuando sostengo tu mirada penetrante como si, desnudaras en un segundo  mi cuerpo,  voluntario, preso del deseo peor aún; incauto y estúpido el instinto  domina mi boca, sin queja, que abrasiva estalla en desenfreno. Eres, vicio, apego, adicción,  devasta implacable todos mis escudos  creándome necesidad de más, el mundo pierde atractivo por que estoy en ti anhelo y ruego que se aletargue  ya que por diminuto que sea el segundo mi deseo es concedido,   enredado bajo mi piel, en guerra de besos Has quedado perdido entre nuestra sangre,  tu sed  y  mi fuego

Yo te quiero de eso no hay duda... Dónde arrancan tus silencios hasta tus excesos Con barba sin ella, o el cabello como lo tengas... Te quiero es verdad, te he querido en tantos sentidos que tu de descubrirlo lo encontrarías aterrador Pero eso si, quiero el paquete completo las arrugas, tu mal carácter, esa bella sonrisa, tus hijos hasta su descendencia aunque hoy sean sólo niños Hay momentos dónde no te quiero, es otra verdad  cuando necesito buscarte, sentirte, verte... me desespera cuando hay tantos silencios que ahogan mi oxígeno de repente cuando busco tu rostro entre la gente ¡te odio! cuando me da rabia por que sé escuchas sus palabras y ella es quién sostiene tu mirada impregnándose de ti Nada sé de ti, sólo la imagen que vendes y te quiero en tu soledad compartida y el secreto... No sé hasta dónde lleguen mis pies, si algún día podré si quiera besar los labios de mi amado, más en pie aún te declaro mi amor y mi odio, mi fe en ti, y t

En tantas raíces y arrugas se esconde, acumulado, la sombra de ti que relata la historia no expresada Cada recoveco, habla por sí mismo de cada hoja seducida por el viento que calló lejos de su árbol... Cada línea en tu pupila es un rostro amado y odiado huella de la alevosía Tu cabello desteñido al tiempo  toda impresión hecha en ti que te convierte en único, especial, suma total del deseo de mi amor.. .

Tengo el privilegio de adornar mis días  con tus ausencias altamente comprensibles la música se carga de tu voz  que entre silencios me llenan de ti Clarea el día mirando tus ojos  entre los miles de retratos viejos Esta soledad es compartida  con la casa, con el sofá y mis rodillas todo parece más frío, y el mundo más grande Tengo también la oportunidad de domar mi carácter, impidiendome correr tras tuyo Me lleno las manos de otra carne mi boca de otros besos, el cuerpo de arduo trabajo,  el cerebro de infinitos libros Ya ves, la luna no me mira con pena en mi rostro empieza a dibujarse medias sonrisas...

de sabor salado tus mejillas serán del dolor producto de las marcas de seductor dulce tu boca que adictivo vuelven los besos en tantas chocolate con pimienta tu loca manía de mirarme llenándome de luz, calor, sabor no sé que han pasado tus manos que de ellas guardas  recuerdos como oscuros secretos en el alma No te atrevas a darme del ácido de tu pena  pareces de repente tomarme en tus brazos sin razón alguna me dejas caer... tu que vives entre la sazón y el desazón   del amargo ayer... dame de beber tu sangre para volver contigo eres espiga que germina en mi alma no te detengas ahora  abre tu pecho déjame entrar...

Aconteció lo indescriptible en un  hermoso  regalo de los dioses  como bocanadas de aire,  me dieron los excesos, besé en tu boca al recuerdo, el deseo. Te vi desnudo de impresiones, te amé la carne anduve en tu sombra,  lamí tus recónditos placeres, vagué en ti dónde ni el diablo te mira quise ser fuerte,  dejarte mi huella, un poco más allá de la alevosía  te dejaste llevar . Entonces,  de un recóndito pedacito brotó, la verdadera, la que no te pertenecerá jamás despiadada,  sin tiempos, esa fiera a la que temo en mis noches de insomnio la que disuelve la razón en olvido . Ella, tomó el control absoluto, de vos,  de nuestros sentidos,  detuvo el reloj  la noche entera   bebió tu sed,  la pasión y mi sangre. A la mujer de anoche no la visten las ropas,  vive entre los lúgubres besos censurados... 

Tengo en mi un cuerpo, por éstas manos miles de veces transitado ante mí, un cuerpo nuevo. ¿Para qué mirar mis piernas temblando? si siento un hambre nueva, insaciable. Percibo sus venas hinchadas, su respiración que se agita inmóvil como yo, en un eterno instante enloquezco. Hierve mi sangre. Pero no quiero romper el hechizo de ese par de cristales claros que me recorren. Te asemejas a un animal asechante midiendo desde mis curvas hasta las distancias que nos separan... Tu cabello desgreñado como mi pensamiento, aturdidos por este momento que deseas tanto como yo. Ven y entrégate al delirio de estas dos lenguas en guerra y la pasión que crece al contacto de los labios.

Si me quieres  si me necesitas si has de extrañarme  también... si sientes miedo frío, calor, deseo soledad si tienes historias que contar o que callar  sólo si me amas si ya no lo haces por que la verdad amor mío me he gastado las palabras que están por inventarse...

¡Cerraré la boca! A tu beso, a la palabra Dejaré pasar los días para que se desgrane  el fantasma de un nosotros ¡cerraré los ojos! a tu rostro bendita imagen que me da vida y olvidaré tu facciones, tu pelo,  cada relieve de ti, en mi memoria ¡Y me falta el aire! se oprime mi pecho me duele la vida en cada inhalación  sólo se caer sobre mis rodillas y recogerme en un rincón... También mis manos Dejaré huérfanas las caricias prometidas convirtiéndolos en puños y ahí, en el oscuro secreto de mi amor lloraré amargamente tu olvido