Es un adiós
Tengo el privilegio de adornar mis días
con tus ausencias altamente comprensibles
la música se carga de tu voz
que entre silencios me llenan de ti
Clarea el día mirando tus ojos
entre los miles de retratos viejos
Esta soledad es compartida
con la casa, con el sofá y mis rodillas
todo parece más frío, y el mundo más grande
Tengo también la oportunidad de domar
mi carácter, impidiendome correr tras tuyo
Me lleno las manos de otra carne
mi boca de otros besos, el cuerpo de arduo trabajo, el cerebro de infinitos libros
Ya ves, la luna no me mira con pena
en mi rostro empieza a dibujarse medias sonrisas...
con tus ausencias altamente comprensibles
la música se carga de tu voz
que entre silencios me llenan de ti
Clarea el día mirando tus ojos
entre los miles de retratos viejos
Esta soledad es compartida
con la casa, con el sofá y mis rodillas
todo parece más frío, y el mundo más grande
Tengo también la oportunidad de domar
mi carácter, impidiendome correr tras tuyo
Me lleno las manos de otra carne
mi boca de otros besos, el cuerpo de arduo trabajo, el cerebro de infinitos libros
Ya ves, la luna no me mira con pena
en mi rostro empieza a dibujarse medias sonrisas...
Los adioses siempre traen la soledad, aunque trates de llenarla de otros besos, pero realmente es una buena manera de olvidar.Ocupar la mente en otras cosas...Bss
ResponderEliminarSi, coincido contigo! Muchas gracias por seguir leyéndome!!
EliminarOuch eso es mas odio que adios
ResponderEliminarNo se trata de odio en sí, más bien es una descripción de un nuevo amanecer lejos de una persona... una nueva oportunidad de comenzar
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